Sinopsis:
Poco a poco, la palabra “precuela” se va filtrando dentro de la jerga cinematográfica, aunque todavía no tiene fe de bautizo académico. Se les llama así a aquellos filmes que se estrenan luego de otro, pero cuya trama sucede antes. Es el caso ahora de la película animada Monsters University (2013).
La tecnología le otorga nuevas posibilidades a Pixar. Si en la cinta original (Monsters Inc, 2001) el gran reto era animar a un personaje peludo como Sully, aquí ello está superado y ahora la computadora le permite a los artistas llenar la pantalla con personajes, texturas, colores, pequeños detalles en los que también hay referencias y chistes escondidos. La cinta debe verse muchas veces para apreciar por completo el nivel de detalle. Sorprendente.
Como era de esperarse, Mike y Sulley no comienzan siendo amigos, si no mas bien rivales. Pero por azares del destino se ven forzados a estar en la misma fraternidad y a trabajar en equipo. En esta cinta se siente un poco la falta de Boo, pero la historia es lo suficiente entretenida como para no darle tanta importancia a eso, ya que, en lugar de enfocarse en el aspecto sentimentalista, Monsters University se enfoca más en hacerte reír.
Monsters University es una muy buena comedia con una animación excelente. Comparándola con la película anterior, los avances en esa cuestión son inmensos. En cuanto a la narrativa, me pareció excelente el ritmo de la película, no aburre en ningún momento, sin embargo, el tercer acto es lo que más resalta de todo el film, ya que la película no termina tal como uno esperaría, lo cual es bueno, muchas cintas de niños ya no hacen esto. El mensaje es claro y habla sobre las consecuencias de nuestros actos y de lograr nuestros objetivos aunque no siempre sea de la manera que lo habíamos planeado.
Aunque en la película original, Mike y Sulley eran un dúo protagonista, en esta ocasión es Mike la estrella principal, dejando al monstruo azul con manchas lilas como secundario, y lo cierto es que funciona, gracias a la buena mano que suelen tener los guionistas del estudio a la hora de crear personajes. La infancia y lucha de Mike sorprende e interesa, y será el vínculo de todos los personajes.
Desde que era un pequeño monstruo y antes de entrar en la universidad, Mike Wazowski (voz de Billy Crystal en español Andrés Bustamante) ya soñaba con convertirse en un Asustador y él sabía, mejor que nadie, que los mejores asustadores salen de Monstruos University (MU). Pero durante su primer semestre en la MU, los planes de Mike se van al garete al cruzarse con el popular James P. Sullivan, “Sulley” (voz de John Goodman en español Víctor Trujillo), un Asustador nato. Por culpa de su desenfrenado espíritu competitivo, ambos son expulsados del prestigioso Programa de Sustos de la Universidad. Y para empeorar las cosas, se verán obligados a trabajar juntos con una extraña pandilla de monstruos inadaptados... si es que quieren arreglar su situación.
La tecnología le otorga nuevas posibilidades a Pixar. Si en la cinta original (Monsters Inc, 2001) el gran reto era animar a un personaje peludo como Sully, aquí ello está superado y ahora la computadora le permite a los artistas llenar la pantalla con personajes, texturas, colores, pequeños detalles en los que también hay referencias y chistes escondidos. La cinta debe verse muchas veces para apreciar por completo el nivel de detalle. Sorprendente.
Como era de esperarse, Mike y Sulley no comienzan siendo amigos, si no mas bien rivales. Pero por azares del destino se ven forzados a estar en la misma fraternidad y a trabajar en equipo. En esta cinta se siente un poco la falta de Boo, pero la historia es lo suficiente entretenida como para no darle tanta importancia a eso, ya que, en lugar de enfocarse en el aspecto sentimentalista, Monsters University se enfoca más en hacerte reír.
Monsters University es una muy buena comedia con una animación excelente. Comparándola con la película anterior, los avances en esa cuestión son inmensos. En cuanto a la narrativa, me pareció excelente el ritmo de la película, no aburre en ningún momento, sin embargo, el tercer acto es lo que más resalta de todo el film, ya que la película no termina tal como uno esperaría, lo cual es bueno, muchas cintas de niños ya no hacen esto. El mensaje es claro y habla sobre las consecuencias de nuestros actos y de lograr nuestros objetivos aunque no siempre sea de la manera que lo habíamos planeado.
Aunque en la película original, Mike y Sulley eran un dúo protagonista, en esta ocasión es Mike la estrella principal, dejando al monstruo azul con manchas lilas como secundario, y lo cierto es que funciona, gracias a la buena mano que suelen tener los guionistas del estudio a la hora de crear personajes. La infancia y lucha de Mike sorprende e interesa, y será el vínculo de todos los personajes.
No es solo la aventura en sí, también es la habilidad narrativa para contarla, con personajes bien diseñados: los principales y los secundarios; con su núcleo argumental bien definido, desarrollado con situaciones disímiles (su última brazada –el final– es quien lo debilita); los diálogos son ingeniosos; hay rico humor y melodrama sutil; todo ello para una grata fábula. Como tal, la película deja aceptable moraleja sobre la amistad; aunque se le puede discutir su otra temática, la de que no es tan necesario estudiar para alcanzar un objetivo (en este caso, nuestros personajes quieren ser los mejores asustadores de niños).
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