La fé siempre ha sido un tema recurrente dentro de la literatura. Generalmente abordada desde la perspectiva de un posicionamiento religioso establecido. Por ello de las múltiples polémicas, y aún más conflictos, que han desatado libros que reflexionan sobre el tema.
Debo decirles que no se me hace fácil escribir una crítica acerca de este film; ya que está llena de simbolismos, alto contenido filosófico y también espiritual; cosas que lo vuelven subjetivo para la percepción de cada persona…pero justo es lo que la hace TAN interesante. Trataré de bajar en papel todo lo que pienso acerca de esta obra.
Tengo que admitir que al principio no quería ver Una Aventura Extraordinaria. Vi el trailer y pensé que ya había visto todo: un hindú que por azares del destino termina de náufrago en medio del océano con ballenas que brillan y pescados voladores… Ah, y con un tigre de bengala. Para mi sorpresa, la película me calló la boca bastante rápido. De pronto me sentí como un niño al que le cuentan un cuento mientras el hombre llamado Piscine Molitor Patel (o Pi para hacerle el paro) le platica su vida a un escritor sin inspiración, no sin antes advertirle que su historia es, como dice el título, extraordinaria.
La narrativa es fluida y fresca, plasmando el viaje interior de nuestro protagonista mientras también recrea vívidamente la cultura en la que crece. Aclarando que no arruinaré la película con spoilers, el trailer ni siquiera sugiere la dirección que toma la película cuando llega el momento de estar en la balsa. Ang Lee, hace un trabajo impecable al traducir con un estilo único una historia igual de memorable a la pantalla.
En ningún momento se siente lenta o aburrida, y la cinematografía (encargada al chileno Claudio Miranda) es increíble. Visualmente se logra un realismo lo suficientemente fuerte como para hacernos creer que compartimos la butaca con Richard Parker (el tigre de bengala) por un rato.
En mi opinión, la película tiene un encanto que pocas películas tienen sin ser demasiado cursis o forzadas. Es una historia simple pero poderosa en medio de una cartelera dominada por los hobbits. Sí, sabemos que tarde o temprano acabaremos en medio del océano con un tigre, pero Life Of Pi es mucho más que eso. No te arrepentirás.
En esa categoría se encuentra “Life of Pi” de Yann Martell, cuyo libro fue rechazado varias veces antes de ser publicado por una editorial canadiense. La narración se convirtió en éxito editorial en 2001. Al año siguiente 20th Century Fox compró los derechos para hacer una adaptación al cine.
La película es el recuento que hace Piscine Molitor Patel sobre su infancia en la zona francesa de la India. Su acercamiento a la religión hindú, católica y musulmana. La vida con su familia, propietaria del zoológico de la región, la cual tiene que emigrar a Canadá. Durante el viaje, una tormenta hace zozobrar la embarcación, y sólo sobreviven Pi, un orangután, una hiena y un tigre; todos en un bote salvavidas. El resto del relato es una historia de adaptación, reflexiones filosóficas y sobrevivencia.
Los efectos visuales y la cinematografía merecen comentarse aparte. La espera para que la animación digital llegara al grado de recreación para que la película fuera veraz, valió la pena. La recreación de la fauna y paisajes y su interacción con Pi, simplemente son asombrosas. La razón es la única barrera que hace no creer que el tigre y demás entorno son reales, porque la visión es engañada extraordinariamente. Definitivamente será una fuerte competidora por los premios del rubro.
La cinematografía de Claudio Miranda es lo mejor del filme. Los filtros y el manejo del encuadre le dan personalidad al cuento y se integran armoniosamente al trabajo digital. El filme es una clara muestra del cómo cámara y computadoras logran un trabajo conjunto para potencializar la narrativa cinematográfica.
Un trabajo visual que se potencializa con el efecto 3D, según comentan quienes la han visto en ese formato. Por lo pronto la película ya forma parte de los trabajos que dictan los cánones para incorporar la tercera dimensión, como también lo son “Hugo” de Scorcese y “Pina” de Wenders.
“Una aventura extraordinaria” es una buena película. La historia es una parábola, como las que abundan en los libros fundamentales de las religiones, pero a diferencia de éstos libros referenciales, la historia en “Life of Pi” no es una reflexión sobre Dios; es una reflexión sobre la fe, y lo que uno quiere creer y concebir por esta vía.
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